Los terremotos han sido una constante en toda la historia de Chile. Nuestro país ubicado en el cinturón de Fuego del Pacífico, nos convierte en una de las regiones más sísmicas del planeta. El 27 de febrero de 2010, cerca de las 3AM, una fuerte actividad sísmica sacudió a nuestro país.
El epicentro del movimiento fue en la costa sur del Maule, un terremoto y luego un maremoto azotó la zona central de nuestro país, con una intensidad de 8,8 grados en la escala Richter. Su origen estuvo en un desplazamiento de la placa de Nazca bajo la placa Sudamericana y se registra como el segundo más fuerte en la historia de Chile.
Considerando la magnitud de los sucesos, nuestros fotógrafos de la época, Marina Molina y Mario Ormázabal, se embarcaron a terreno para dejar testimonio fotográfico, los desastrosos efectos del terremoto y especialmente del tsunami, que dejó en el suelo a gran parte de las regiones del sur. En las imágenes podrás visualizar a Dichato, Tomé, Curicó, Pelequén y Talca.
Acerca del autor
Las imágenes fueron capturadas por Marina Molina, fotógrafa del Departamento de Fotografía del Museo Histórico Nacional.
